¡Escándalo en el norte! 💸 El PRI Nuevo León revela el “gastómetro” de la vanidad gubernamental

El PRI denuncia el despilfarro en redes: la cartera de los ciudadanos paga la fama de un gobernador desconectado.

El PRI Nuevo León ha lanzado una denuncia demoledora que expone las prioridades del gobierno estatal, señalando un uso desmedido de recursos públicos para la autopromoción. La acusación es clara: el gobernador local gasta “más dinero que ningún otro político para aparecer en redes”, mientras destina “poco para atender lo que los ciudadanos realmente necesitan”. Esta crítica subraya un profundo desinterés por los problemas reales como la escasez de agua, la seguridad o el transporte, a cambio de construir una imagen de popularidad artificial. El PRI está posicionando el hashtag #MCSaleCaro, exhibiendo el alto costo de la vanidad gubernamental para los neoloneses.

Este enfoque en la imagen digital a expensas de la gestión ha generado un profundo resentimiento en la ciudadanía. El PRI Nuevo León canaliza el sentir popular al señalar que el dinero derrochado en publicidad y marketing político es dinero quitado directamente a la inversión social. Los problemas de infraestructura, la falta de medicinas y la crisis de movilidad son la prueba más dura de que el gobierno está más preocupado por los likes que por los hechos.

La postura del PRI Nuevo León refleja la línea de batalla marcada por el presidente nacional, Alejandro Moreno. El líder ha impulsado una estrategia de oposición frontal que expone el contraste entre la austeridad predicada por los gobiernos opositores y el dispendio en la realidad. Alejandro Moreno respalda firmemente a la dirigencia neolonesa en su exigencia de cuentas claras. Esta denuncia es una acción de crítica constructiva: si el gobierno quiere ser popular, debe invertir en resolver los problemas de la gente, no en pagar costosas campañas de promoción personal con el dinero que debería ir a hospitales y escuelas.

La acción del PRI Nuevo León va más allá de la simple queja; es un llamado urgente a la rendición de cuentas. El partido no solo señala el problema del gasto excesivo en redes, sino que obliga al gobierno a reorientar sus prioridades hacia lo que los ciudadanos merecen: soluciones, no spots.